Se avecinan tiempos difíciles para la economía mundial. Para la actual situación escuchamos en diversos medios y a especialistas el famoso dicho de “apretarse el cinturón”, saber priorizar nuestras necesidades para poder atender a las más básicas y dejar de lado las superfluas.

Esta reflexión también la hemos llevado a cabo en Césped.es y hemos sacado algunas conclusiones que pueden servir de mucha ayuda al poseedor de un terreno con césped.

Sin duda, el primer pensamiento de un propietario de césped es la reducir gastos en él reduciendo a su vez tareas de mantenimiento, de fertilización, aplicación de fitosanitarios y, como no, reducir tiempos de riego.

Evidentemente, con este planteamiento reduciremos los gastos que genera un césped pero…. hagamos un esfuerzo por pensar en que situación nos lo encontraremos dentro de un año.

No es difícil imaginar que con un riego escaso, falto de fertilizantes, abandonado a su suerte frente a gusanos y otras plagas, hongos, trastornos y con un mantenimiento escaso, lograremos en un año que nuestro precioso césped se convierta en uno enfermo, seco y difícil de recuperar.

El césped es un ser vivo y como tal refleja la falta de nutrientes y cuidados. No es una pared que podamos decidir: “Este año no la pinto. Esperaré un par de años más.”

Aparte del daño que le provocaríamos al césped con la anterior actitud hay que tener en cuenta también que dicho ahorro no será tal ya que todos sabemos que recuperar un césped resulta más caro a la larga que si mantenemos unos cuidados correctos de manera continua. El césped, dejado a su suerte, enfermará e incluso desaparecerá. Luego tendremos que recurrir a herbicidas, plaguicidas, resembrado o instalación de tepes, nueva preparación y mejora del terreno y, en muchos casos, tendremos que requerir la ayuda de expertos jardineros. Todos podemos deducir lo que esto supone en su conjunto, un gran desembolso económico.

Entonces se preguntará, ¿no hay ninguna manera de reducir gastos en el césped?.

Por supuesto que la hay y además el césped se va a beneficiar y a mejorar su aspecto.

Para ello hay que conocer mejor que nunca a nuestro césped. Ha llegado el momento de acercarnos a él y examinarlo. Ningún césped es igual ni tiene las mismas necesidades y problemas. Existen múltiples variables que lo convierten en único y diferente incluso del vecino: tipo de semilla, suelo, agua, plagas, hongos, etc… Usted tiene que convertirse en el verdadero experto en su césped. Concretemos en algunos puntos básicos las medidas a tomar.

  1. RIEGO: La mayoría de las personas encienden su programa de riego con la llegada de la primavera y lo apaga con la llegada del Otoño. Durante este período no realizan ajustes en las frecuencias y tiempos de riego. Un riego escaso resulta perjudicial, pero el exceso contribuye además a la aparición de hongos, asfixia por encharcamiento y aumenta el gasto hídrico. Solucionar esto es tan fácil como comprobar cuanto tiempo conserva la humedad el suelo tras un riego y ajustar el programador a las necesidades hídricas del césped con más frecuencia.
    Aprenda más en: https://www.cesped.es/riego-del-cesped/
  2. FERTILIZACIÓN: Mida con exactitud el terreno para comprobar la cantidad exacta con la que abonar y aplíquela en los momentos que aconseja el envase así como en lo referente a los espaciados entre abonados.
    Aprenda más en: https://www.cesped.es/fertilizacion-del-cesped/
  3. FITOSANITARIOS: “Prevenir antes que curar”. Esta máxima que nos aplicamos a nosotros mismo hemos de aplicarla también al césped, recuerda, es un ser vivo que también sufre enfermedades. Si sabemos que en nuestra zona hay alguna plaga endémica y que solemos combatir todos los años, entonces adelantémonos a ella. Aprendamos a identificarla y prevenir su aparición aplicando los fitosanitarios pertinentes semanas antes de su aparición. Si aplicamos el remedio cuando el daño ya se ha extendido la cantidad de producto a aplicar será mayor, consecuencia= mayor gasto económico.
    Aprenda más en: https://www.cesped.es/plagas-y-enfermedades-del-cesped/
  4. SIEGA: Una siega correcta en altura va a producir un césped más sano, vigoroso y resistente a problemas que repercutirían en nuestro bolsillo para su solución posteriormente.
    Aprenda más en:https://www.cesped.es/corte-del-cesped/
  5. OTRAS LABORES DE MANTENIMIENTO: No hay que descuidar otras tareas de mantenimiento que aunque menos frecuentes van a mejorar el césped pudiendo afrontar mejor los problemas y enfermedades.
    Aprenda más en: https://www.cesped.es/mantenimiento-del-cesped/

Seguro que vendrán a nuestra mente tiempos pretéritos en los que recién instalado nuestro césped y por desconocimiento regábamos demasiado, encharcándose, o en poca cantidad, llegando a secarse. Con el tiempo supimos controlarlo y también otros aspectos de su cuidado. Aumentemos un grado más ese conocimiento de nuestro césped y tendremos un césped más sano, bonito y……… más económico.

El equipo de Césped.es