Los trastornos o fisiopatías del césped natural son todos aquellos problemas que puede sufrir el césped y que no son provocados ni por plagas ni por hongos.
- SEQUÍA
- EXCESO DE AGUA
- SALINIDAD EN AGUA Y SUELO
- SUELO COMPACTO
- SUELO DE MALA CALIDAD
- PROBLEMAS EN LA SIEMBRA
- QUEMADURAS POR EXCESO DE SOL
- FRÍO
- SOMBRA
- FERTILIZACIÓN EXCESIVA
- CARENCIA DE NUTRIENTES BÁSICOS (NITRÓGENO – FÓSFORO – POTASIO – ETC…)
- SIEGA MUY CORTA
- EXCESO DE FIELTRO
- EXCREMENTOS Y ORINES DE PERROS Y GATOS
- HERBICIDAS MAL APLICADOS
- CONTAMINACIÓN DEL SUELO
- ÁRBOLES Y SUS RAÍCES
En algunas épocas del año, como es el verano, las precipitaciones son escasas o nulas, a veces durante periodos muy prolongados. Nos encontramos entonces con un tiempo de sequía. Obviamente la solución pasa por un aporte racional y óptimo de agua, ello es posible llevando a cabo una serie de medidas que palíen estas situaciones extremas de sequedad y que les ofrecemos a continuación:
- Riegue abundantemente, no hay que quedarse corto. Es mejor espaciar los riegos y aumentar el tiempo de cada irrigación que hacer riegos muy frecuentes pero escasos en cantidad de agua.
- Sea eficaz en el riego. Un riego leve no llega a bajas profundidades. El agua debe llegar a profundidades de 14 a 21 cm., eso alienta a las raíces a desarrollarse en profundidad, siendo capaces en épocas de sequía de buscar las reservar de agua de capas más profundas.
Es debido a un exceso de riego normalmente, aunque en otras ocasiones es producto de un mal drenaje del suelo. Todo ello produce encharcamiento provocando que la raíz se asfixie por falta de oxigeno, incremento de enfermedades y que la planta termine pudriéndose y las hojas tomen un color amarillento. Riegue por la mañana temprano para que no se encharque el suelo si tiene mal drenaje.Consulta las paginas dedicadas al riego y al drenaje para mejorarlos.
Tanto el agua como el suelo pueden contener un alto nivel en sal. Aunque es típica de zonas costeras no está de más hacer un análisis del agua en un laboratorio si utilizamos un pozo particular. Este trastorno se identifica por las quemaduras que presentan las puntas de las hojas.
Es producto de un tránsito muy frecuente. Si a ello añadimos un suelo arcilloso los problemas de encharcamiento y falta de oxígeno serán inevitables. Para solucionarlos tendremos que realizar las labores de aireación y escarificado. También podemos crear un sendero. Consulta las páginas referentes a estos dos mantenimientos.
Hace referencia a suelos con exceso de piedras, muy arcillosos, con restos de obras como cementos, etc…
La solución pasa por una preparación previa a la siembra o colocación de tepes. Los síntomas en el césped natural de un suelo malo son un crecimiento escaso y hojas amarillentas. Consulta la pagina dedicada a la preparación del suelo.
Una vez sembrado el césped, existen una serie de problemas que suelen padecer y ante los que hay que estar muy atentos, ya que estos primeros días de su germinación y desarrollo pueden marcar la pauta de su futuro. Los problemas que suelen presentarse son:
- Las semillas son viejas y han perdido la capacidad de germinar.
- Las semillas han sido enterradas muy profundo y no salen a la superficie.
- Tras la siembra se ha compactado el suelo y la semilla no tiene fuerza suficiente para romperlo y germinar.
- Hormigas y pájaros se llevan las semillas.
- Exceso de agua en el riego las ha podrido. La falta de agua no provoca la germinación o mueren secas. Se aconseja de modo general regarlas a modo de lluvia 2 ó 3 veces al día.
- El estiércol aplicado al suelo no ha sido uniformemente repartido y en contacto directo con la semilla la puede quemar o pudrir.
- Un exceso de fertilizantes puede quemar las semillas.
- Días muy fríos o calurosos. Ambos climas inhiben la germinación y desarrollo de las semillas recién sembradas. No se ha de sembrar ni en invierno ni verano.
- La semilla no esta en un buen contacto directo con la tierra, necesario para la germinación. Pasar un rulo o una bombona de butano para ponerlos más en contacto.
Varios son los motivos:
- Se haya plantado una variedad de césped natural poco resistente al calor intenso en un lugar donde es habitual ese tipo de clima.
- Un corte muy bajo con calor intenso hace que los cuellos cercanos al suelo y no preparados para la exposición directa se quemen.
- También puede producir quemadura el agua en las hojas cuando se riega a pleno sol, produciéndose el efecto lupa.
El frío intenso provoca quemaduras en la planta del mismo modo que el calor fuerte. Así que la única manera de prevenirlo es escogiendo variedades de césped natural acordes a las peculiaridades climáticas de la zona. El efecto del frío a consecuencia de heladas se percibe en el color marrón de las hojas. Es posible que no mueran y puedan rebrotar en primavera.
Algunas de las especies que peor soportan el frío son: Cynodon Dactylon (Bermuda), Stenotaphrum Secundatum (Gramón ó Hierba de San Agustín), Paspalum Notatum (Hierba de Bahía), Pennisetum Clandestinum (Kikuyu) y Zoysia Japónica (Zoysia).
Las zonas de sombra en los jardines de césped natural es un problema común a la gran mayoría de los jardines de césped natural. A diferencia de otros problemas, este normalmente no se puede atajar, ya que supondría tener que eliminar los elementos que proporcionan sombra como paredes, árboles, etc…
La solución pasa por sembrar variedades que se adapten ó soporten bien la sombra.
Con todo, aun las variedades que mejor soportan la sombra también necesitan la luz del sol directa para vivir, por un mínimo de tiempo que debe ser de un 50% de luz filtrada ó un mínimo de 4 horas.
Los síntomas de la sombra en el césped natural son: tallos de crecimiento fino, tiernos y pálidos.
Las variedades que mejor resisten la sombra son:
- Variedades de Verano: Dichondra – Bermudas – Grama Brasilera – Gramillón – Kikuyo – Zoysia
- Variedades de Invierno: Festuca Alta – Festuca Fina – Rye-grass perenne
Si la sombra es proporcionada por árboles, habría que estar muy pendiente de su poda para que las ramas no excedan en longitud más de lo necesario.
El aporte de Nitrógeno a un césped natural de sombra debe ser menor que en que en las zonas de sol, ya que acelera el crecimiento y no es eso lo que se pretende ni necesita. Por el contrario es mejor que el fertilizante tenga una mayor concentración de Fósforo de lo habitual para desarrollar el sistema radicular.
Cuidados específicos para césped en zonas de sombra:
- Regar por la mañana y con menos frecuencia que al césped de zonas sin sombra.
- Siega alta, para que tenga suficiente hoja que capte la luz del sol.
- Fertilizar un 50% menos de Nitrógeno y con un 50% más de Potasio de los niveles utilizados en las zonas sin sombra.
- Evitar el tránsito al mínimo posible.
- No olvide realizar las labores de aireación y escarificado para evitar la compactación del terreno.
De todos los elementos que pueden componer un fertilizante, es el Nitrógeno (N) el que puede ocasionar problemas al césped natural por exceso provocándole quemaduras. Los demás elementos como el Fósforo y el Potasio tendrían que aplicarse en una altísima cantidad para que lo perjudicara.
A la hora de esparcir el fertilizante siempre habrá que cuidar que se reparta de manera uniforme evitando que queden zonas sin abonar o por el contrario con mucho abono.
El exceso de Nitrógeno provoca en el césped:
- Las hojas se queman.
- El crecimiento es más rápido y por tanto hay que segar con más frecuencia.
- El césped se enternece por el acúmulo de agua y lo hace propenso al ataque de plagas, hongos, sequía ó frío.
- La capa de fieltro que se forma es mayor.
Consulte la página dedicada a los fertilizantes para conseguir la fertilización adecuada.
La falta de alguno de los elementos que a continuación detallamos provoca daños en el césped natural:
- Nitrógeno (N):
-Escaso crecimiento del césped.
-Las hojas tienen un color verde claro ó pálido tendente al amarillo.
-Aparecen malas hierbas con pocas necesidades de Nitrógeno como el trébol.
- Fósforo (P):
-Escaso crecimiento del césped.
-Las hojas tienen un color verde oscuro con puntas amarillentas y con tendencia a secarse.
-Las hojas se curvan y aparecen pigmentaciones violáceas.
- Potasio (K):
-Las puntas y bordes de las hojas se tornan amarillas y terminan secándose.
- Azufre (S), Hierro (Fe) y Magnesio (Mg):
No por precisarlos en menor cantidad carecen de importancia y su aporte es necesario, por ello no deben faltarle al césped. Su ausencia, pese a provocar un amarillamiento del césped, es difícil de detectar a simple vista y se hace necesario un análisis en laboratorio del suelo y hojas.Un suelo muy rico en cal suele ser sinónimo de falta de Fósforo, Hierro, Manganeso, Potasio y Zinc. El motivo es que el suelo se vuelve muy insoluble y los hace difícil de absorber por las raíces.La falta de Hierro se traduce en el nacimiento de hojas amarillas.
El remedio para evitar la ausencia de nutrientes pasa por:
- Hacer un análisis previo del suelo.
- Posteriormente aplicarle un fertilizante equilibrado en N-P-K y que además contenga otros micronutrientes.
- Los micronutrientes como Boro, Cobre, Hierro, Manganeso, Molibdeno y Zinc también se pueden aplicar en forma de quelatos al suelo y hojas con la particularidad de que no les afecta la indisolubilidad de los suelos calizos.
- Para acidificar los suelos muy calizos, con un pH muy alto superior a 8, se puede incorporar al suelo, antes de la siembra, Azufre en polvo con el fin de que baje el pH del suelo y los micronutrientes puedan ser absorbidos por las raíces.
Puede visitar las páginas referentes a Tipos y Propiedades de suelos y Fertilizantes para conocer más sobre el tema.
Cada variedad de césped natural precisa un tipo de corte específico. Un corte más bajo del aconsejado lo dejará débil y a merced de enfermedades. Regule la altura de la cuchilla convenientemente.
Puede visitar la página referente a Corte del césped para conocer más sobre el tema.
El fieltro se forma de manera natural a partir de restos en descomposición de raíces y hojas. Puede formar una capa de entre 1 y 3 cm. entre la hierba el suelo. Daña al césped natural al no permitir el paso adecuado del agua, aire y fertilizantes.
El escarificado es la labor que logra eliminarlo. Visite la página referente al escarificado para ampliar la información.
Aparte de lo antihigiénico que resulta para las personas que hacen del césped natural un lugar de recreo y disfrute, los excremento y orines provocan en el césped manchas amarillentas rodeadas de un círculo de césped de color verde intenso y crecimiento rápido.
Aparte del control de dichos animales o adiestramiento para que lo haga en un lugar menos visible, podemos utilizar cerca del césped algún emisor de radiofrecuencias que les resulte molesto.
Los herbicidas mal empleados, al igual que los fertilizantes o una mala práctica en el riego ó siega, pueden producir daños al césped natural. Si aplicamos más de lo aconsejado por el fabricante podemos quemarlo.
Cerciórese de que es adecuado para su tipo de césped, que malas hierbas elimina, dosis aconsejada y forma de empleo leyendo la etiqueta del fabricante.
No debe de aplicar Glifosato, es un potente herbicida que elimina no sólo las malas hierbas sino también al césped natural.
Hay que seguir escrupulosamente las recomendaciones de uso de los herbicidas. De entre las normas generales de uso de los herbicidas apuntamos las siguientes:
Aplicar las dosis recomendadas por el fabricante, no lo que nosotros queramos.
No aplicar cuando haya aire.
No emplear cuando haya calor, esperar al atardecer o amanecer y evitaremos riesgos de quemaduras en la planta
Limpiar bien los materiales empleados, mochilas de agua y difusores, guantes, mascarillas, etc…
Se puede deber a un vertido incontrolado, ocasional o accidental de algún producto tóxico para el césped natural.
Pueden ser desde productos utilizados para la limpieza como aguas con detergentes ó lejías hasta gasolina, aceite u otros productos tóxicos.
Cuando rellenemos los esparcidores de productos como fertilizantes, herbicidas, funguicidas, pesticidas o gasolina para el cortacésped, hay que cuidar de hacerlo en un lugar donde si se derrama no caiga en el césped.
Los árboles ó sus raíces cercanos al césped natural pueden ocasionarle algunos problemas.
El tronco y entramado de ramas y hojas proporcionan una sombra al césped que si no recibe suficiente luz o es una variedad de poca resistencia a la sombra puede tener un pobre desarrollo.
Dependiendo de la variedad de árbol, sus raíces pueden sobresalir algo del suelo o estar tan a ras que no permiten el desarrollo del césped natural ó un cómodo mantenimiento como puede ser la siega.
Por otro lado puede creerse que las raíces del árbol competirán con las del césped a la hora de la captación de nutrientes y agua, aunque de una forma muy poco significativa ya que las raíces del césped están demasiado cercanas al subsuelo como para sentirse amenazadas por las del árbol.
Es importante ser cuidadoso a la hora de aplicar fertilizantes y con el uso de plaguicidas, herbicidas u otros fitosanitarios al árbol y césped, si no se manejan con cuidado lo aplicado a uno puede perjudicar al otro.
Haga un estudio ó consulte a un especialista para conseguir que árbol y césped convivan en armonía, la convivencia de ambos dan un inmejorable aspecto a una pradera de césped natural. Una buena solución seria plantar en los alrededores del árbol alguna variedad de césped que resista la sombra.