Una vez que se determina las características del suelo y climatología de la zona, llega la hora de prepararlo. Estos son las labores a realizar:

Eliminación de malas hierbas

Es mejor acabar con la malas hierbas antes de empezar a plantar el césped natural, así nos darán menos problemas en el futuro.

Lo mejor es regar el terreno diariamente (unas dos semanas) para provocar que germine toda la mala hierba que esté enterrada para luego usar un herbicida total, repitiendo el tratamiento a la semana sin dejar de regar.

Herramientas para quitar malas hierbas de © Outils WOLF

Herramientas para quitar malas hierbas
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Labrado

Consiste en remover la tierra, descompactándola. El arado consigue romper la superficie posibilitando la circulación del aire y la humedad. Por ello, es una labor fundamental en suelos arcillosos. Además se consigue eliminar las malas hierbas y favorece la actividad biológica en el suelo de los organismos que fijan el nitrógeno atmosférico.

Podemos decir por todo ello que es una actividad saludable para las plantas y previene de enfermedades que le afectan así como de insectos dañinos.

Ya que no se puede volver a hacer una vez plantada la semilla o tepe, es importante que se realice de una forma adecuada.

Se hace a unos 20 – 30 cm. de profundidad como mínimo, pasando todas las veces necesarias hasta conseguir una tierra lo más descompactada posible. Aprovechar para quitar desechos, como piedras, plásticos, raíces… No se aconseja hacerlo con el suelo mojado o encharcado pues no se conseguiría dejar la tierra suelta y libre de terrones, fin principal del labrado.

Hasta 100 m² se puede hacer sin maquinaria, con una azada, aunque es un trabajo duro. A partir de superficies mayores es aconsejable hacerlo con un motocultor. Si el labrado vas a hacerlo tu mismo, no es rentable comprar uno sólo para realizar esta labor así que puedes alquilarlo.

Labrado de suelo © Outils WOLF

Labrado del suelo
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Drenaje

Es fundamental planificar y realizar un buen drenaje. Si vemos que el terreno no absorbe bien el agua o hay zonas que por las pendientes adyacentes reciban más agua de la que puede absorber entonces es necesario realizar una labor de drenaje, de esta manera evitaremos que el suelo se encharque y el césped natural enferme y se pudra por asfixia radicular o ataques de hongos como el Pythium.

Por el contrario, un buen drenaje proporciona una hierba y tepe más sanos, aprovechará mejor los nutrientes, contraerá menos enfermedades, se compactará menos, elimina sales solubles con mayor facilidad y todo ello repercutirá favorablemente en su economía a la larga.

En los campos de deportes y recreo, que soportan un gran uso y tráfico, un mal drenaje es una carga negativa que tendrá que añadir a su sufrimiento.

MÉTODOS DE DRENAJE:

  1. Eliminando unos 10 cm. como mínimo (se aconseja más de 50) de tierra y sustituyéndola por arena.
    Cuanta más mejor drenaje. No hay que preocuparse por la falta de nutrientes de la arena, se le irá aportando con fertilizantes en el futuro, la mayoría de campos deportivos con césped natural tienen la base de arena.
  2. Instalando una red de drenaje.
    Consiste en enterrar a unos 50 cm. de profundidad tuberías en paralelo a una distancia entre ellos de 2 a 3 mts. Todos ellos deben converger con una ligera inclinación para que pueda correr el agua en otra tubería principal encargada de desaguar. La disposición de las tuberías puede variar según el terreno, aunque la forma de entramado mas común es la llamada espina de pez. Estos tubos suelen ser de polietileno corrugado, se fabrican especialmente para este cometido de drenaje y son capaces de recoger el agua del subsuelo gracias a la porosidad que proporcionan unos pequeños agujeritos. Para ayudar a esta porosidad, la construcción se complementa recubriendo las tuberías por todo su perímetro con gravilla, unos 10 cm. por su parte inferior y de 20 a 25 por arriba. Luego se recubre con una capa de tela geotextil, material que deja pasar el agua pero no la tierra, y finalmente se cubre todo con arena o la implementación de substrato elegida.
  3. Nivelando el suelo.
    Hacia desagües naturales del terreno o hacia un desagüe artificial como una arqueta subterránea. Este último caso puede darse en terrenos pequeños donde por cercanía con una piscina podamos derivar hacia su arqueta de salida de aguas la sobrante del césped o a otra construida para este motivo.

Instalación de riego subterráneo

Si quieres disfrutar de tu césped natural y disponer de tu tiempo libre de la manera que te plazca no debes dudarlo: instala un riego automático

Puede parecer que el coste de la instalación de un riego automático es caro, pero nada mas lejos de la realidad. Se sorprenderá si pregunta a un profesional y los beneficios, a la larga, serán muchos.

Debes considerar que el césped natural es un ser vivo y que es una de las plantas que más agua necesita para su desarrollo. Es por ello de vital importancia la constancia en el riego. Si a ello le añadimos la importancia de unas cantidades de agua correctas y que es mejor hacerlo a unas determinadas horas del día, habrá que convenir en lo acertado de poner un riego automatizado.

Es para algunos el trabajo mas complicado a la hora de construir nuestro césped natural por varios motivos:

  1. Hay que trabajar con materiales y elementos desconocidos para muchos como válvulas, manómetros, programadores, tuberías,….
  2. Hay que considerar la presión del agua, el caudal, metros de tubería…
  3. Hay que determinar / diseñar los sectores de riego y su cobertura.
  4. Un fallo en la creación del riego subterráneo puede suponer tener que levantar parte del terreno nuevamente con los inconvenientes que eso supone.
  5. Si no hay presión habrá que poner una bomba.
  6. Hay que hacer conexiones eléctricas al programador y las válvulas.
  7. Hay que determinar la profundidad justa de tuberías y aspersores emergentes.
  8. Controlar el reflujo del agua para que no sea utilizada por personas o animales.

Si existen problemas de presión de agua en la zona, si la extensión de terreno a regar es amplia o irregular (ya sea por desniveles o construcciones como casas u otro tipo de elementos que hay que salvar del riego) o si no tiene por costumbre realizar este tipo de trabajos o no esta familiarizado con los anteriores elementos o herramientas, créame que lo más acertado es contratar los servicios de un profesional. Una vez instalado las posibilidades de enmendar algunos errores de construcción o planificación son complejos o pueden suponer tener que sembrar de nuevo el césped en aquellas zonas afectadas.

Implementación de substrato

Si el suelo es muy arenoso o pobre en nutrientes, lo mejor es aplicarle una enmienda orgánica (estiércol, mantillo, turba, etc… ), conseguiremos una mayor retención de agua y habremos aportado nutrientes para el césped.

Si es muy arcilloso, con tendencia al encharcamiento, la enmienda se hará de arena. No hay que preocuparse pensando en que la arena no contiene nutrientes. Has de saber que la mayoría de terrenos deportivos con césped natural, como pueden ser los de fútbol, se realizan poniéndoles arena como base, ya que los nutrientes se le pueden añadir después en forma de fertilizantes granulados sin que ello le suponga ningún problema al desarrollo del césped.

Otros motivos por los que se hace necesaria la implementación de substrato son para rellenar desniveles provocados por alguna construcción cercana o que esa misma construcción ha rellenado los aledaños con material de obra, cemento, zahorra, etc… para evitarse complicaciones.

El espesor aconsejable que debe tener un césped natural de tierra vegetal son 10 cm. como mínimo.

A la hora de comprar la tierra has de observar que cumpla ciertas condiciones de calidad, ya que todas no son iguales:

  1. Debe pertenecer a la capa superficial del suelo, a los primeros 40 cm. Esta es la zona más rica en nutrientes, materia orgánica y minerales. Presenta un color marrón oscuro y abundancia de raíces finas. Otro rasgo de la capa superficial es que germinan malas hierbas en cuanto se riega un poco ya que indica que no es del subsuelo puesto que no suele haber semillas de hierbas a esa profundidad.
  2. No debe tener muchas piedras, ya que aparte de no aportar ningún beneficio al césped dificultan y entorpecen las labores de mantenimiento y nivelado. Además resultan molestas porque pueden notarse al pisar el césped.
  3. No debe ser arcillosa, pues provoca problemas de encharcamiento y entorpece la aireación del césped.

También puede mezclarse arena en la capa inferior y substrato orgánico sobre ella, esta es desde luego una buena opción ya que tendremos las ventajas de un buen drenaje y un suelo rico en nutrientes.

Abonado de fondo

Consiste en incorporar fertilizante. Las dosis pueden variar dependiendo del tipo de suelo o variedad de césped natural que se implante.

De manera general se puede abonar con 6 Kg. por cada 100 m² de 15-15-15 (llamado comúnmente «triple 15») que contiene proporciones de Nitrógeno, Fósforo y Potasio a partes iguales.

Nivelado

Todas las labores anteriores habrán producido desniveles y acumulaciones de tierra.

Para evitar que en el futuro nuestra pradera se vea con ondulaciones hay que nivelar el terreno. Ello se consigue con un rastrillo.

Esta labor también permite eliminar como piedras, palos, raíces y demás elementos o residuos que pueden resultar molestos en el futuro.

Rastrillado de suelo © Outils WOLF

Rastrillado del suelo ©
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Siembra, colocación de tepes o estolones

  1. Semilla
    A la hora de sembrar semillas es importante ver las dosis por metro cuadrado que indica el proveedor. Lo normal suele ser de 35 a 40 gr. por m². Hay que evitar un exceso de semillas pues los plantones podrían pudrirse. Si es un suelo fértil podría bastar con 30 gr por m²; si fuera muy pobre se puede aumentar hasta 60 gr.
    Para sembrar semillas la época ideal es Primavera y Otoño, pero en climas cálidos puede realizarse también en Invierno. Tenga en cuenta si vive en zonas de frío que el césped debe de haber enraizado antes de que lleguen las primeras heladas.
    La siembra se hace a voleo, es decir, esparciendo puñados de semilla con la mano de manera que se repartan por el suelo uniformemente.
    Se hacen dos pasadas, una a lo largo y otra lo ancho. También se puede utilizar una sembradora para sembrar grandes zonas.
    No es aconsejable hacerlo con viento si la semilla es muy pequeña aunque es un buen método humedecer un poco el suelo para evitar que salgan volando.
  2. Tepe
    Puedes sustituir el sembrado de semillas por la colocación de Tepes. El Tepe son planchas o rollos de césped natural que ha sido sembrado en campos de cultivo para ser extraído con máquinas especiales cuando es demandado. Se pueden comprar en la misma finca, en viveros e incluso pueden llevarlo a domicilio.
    Para extensiones no muy grandes de terreno es una buena alternativa ya que se dispone de un césped natural sano y bonito en pocos días a un precio que seguramente le resultará más barato de lo que piensa, ya que se está convirtiendo en un método de siembra muy común y por tanto existen muchas empresas que lo cultivan.
    Puedes ponerlo casi en cualquier época del año, con preferencia en Primavera o principios de Otoño y evitando no ponerlo en días de mucho calor en verano o mucho frío en invierno.
    Normalmente podrás elegir entre diferentes variedades de tepes de césped natural según le quieras dar un uso deportivo, de transito, ornamental, resistente a sombra, sol, sequía, etc….
    Los viveros suelen criar las variedades más comunes y que mejor se adaptan a la zona donde vivas. Déjate asesorar por ellos o por algún profesional de la zona si vas a instalarlo tu mismo aunque lo ideal y más cómodo resultaría dejar que lo instalaran ellos, pueden prepararte el terreno, instalarte un riego subterráneo y colocarte el tepe en apenas 2 ó 3 días, listo para ser usado y por poco dinero.
    Si vas a colocarlo tu mismo, evita tenerlos almacenados sin plantar mucho tiempo pues el césped perdería vigor y se secarían tanto las hojas como las raíces.
    Ten en cuenta también que los rollos de tepes son pesados y necesitarás ayuda y un carrillo para su manejo.
    Hasta llegar el momento de la colocación hay que seguir los mismos pasos que para la siembra por semillas descritos anteriormente en cuanto a labrado, drenaje, nivelado, etc…
    Riegue la tierra unos días antes de la colocación entre 15 y 20 cm de profundidad. Antes de poner los tepes la tierra debe estar ligeramente húmeda, ni muy seca ni muy mojada.
    Se colocan en líneas paralelas y a modo de los ladrillos de la paredes, si en algunas juntas existe un poco de separación entre planchas de tepes, no se preocupe, rellénelas con un poco de arena y con el tiempo el crecimiento del césped lo irá tapando.
    Mientras realiza el trabajo evite pisar el tepe en exceso, use tablones de madera por los que desplazarse mientras los coloca, así repartirá el peso su cuerpo y el de los materiales que utilice.
    A continuación se les pasa un rulo para asentarlos, nivelarlos y poner en contacto más firmemente la tierra enraizada del tepe con el suelo.
    Riego: a las dos o tres semanas el tepe estará arraigado y listo para su uso y disfrute, siempre y cuando haya disfrutado de un correcto riego, un buen suelo y calor.
    Otra ventaja de los tepes es que es menos susceptible a la aparición de malas hierbas.
  3. Estolones
    Existe otra forma de plantar césped natural que es propia sólo de algunas variedades como el llamado Gramón, Stenotaphrum secundatum, la llamada plantación por estolones.
    El Gramón es una especie de césped que se expande como una enredadera por el suelo, tiene un tallo grueso del que a intervalos, de sus nudos, salen hojas también muy gruesas.
    El procedimiento consiste en cortar con unas tijeras trozos con 3, 4 o más nudos y luego irlos pinchando en la tierra quedando enterrado la mitad de su longitud e inclinados, ello permite que de los nudos surjan raíces que tendrán fácil y rápido contacto con el suelo.
    La separación entre cada esqueje comprenderá entre 15 y 30 cm. A menor distancia entre ellos antes quedará tupido de Gramón, que suele estar entre 2 y 3 meses. Por ello se suele sembrar alguna variedad de semilla que tenga una rápida germinación, como el Ray-Grass y conseguir una pradera de césped natural bonita y verde hasta que termine de extenderse y se los «coma» el Gramón. Así evitaremos tener que ver una tierra desnuda y fea mientras termina de extenderse totalmente.
    Tampoco hay que sembrar demasiadas semillas de Ray-Grass, para que no dificulte en exceso el crecimiento del Gramón.
    Para conseguir Gramón puedes acudir a parques, zonas deportivas y de recreo o campos de golf, en sus periferias suelen tenerlo plantado y no lo cortan con regularidad por estar semiabandonados por lo que puedes llenar algunos sacos con trozos largos y cortarlos luego en estolones.

Rastrillado

Una vez esparcida la semilla hay que enterrarla, sólo así se consigue la buena germinación y que no sea comida por hormigas o pájaros.

Se pasa el rastrillo de manera muy suave y superficial ya que no hace falta que la semilla quede muy enterrada, eso dificulta su germinación. Debe quedar enterrada entre 0,5 y 1 cm., si queda muy enterrada morirá por agotamiento de sus reservas.

Rulo

Se utiliza para poner a la semilla más en contacto con la tierra y eliminar los surcos e irregularidades originados por el rastrillado.

Puede parecer una labor sin importancia, pero es muy beneficioso y conseguirás aumentar el porcentaje de semillas que llegan a alcanzar la germinación.

Valora si te interesa comprarlo o alquilarlo.

También tienes la posibilidad de fabricarlo o utilizar algo parecido como una bombona de butano.

Rulado de suelo © Outils WOLF

Rulado del suelo ©
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Riego tras la siembra

El calor y la humedad serán los encargados de estimular la germinación de las semillas, pero un riego mal dosificado o muy abundante o escaso puede arruinar nuestros planes de lograr un sano y bonito césped natural.

Inmediatamente después de la siembra hay que regar con una frecuencia de 2 a 4 veces diarias con el objetivo de que el suelo contenga una humedad que alcance de 2 a 5 cm. de profundidad. Es preferible regar a modo de lluvia fina para que la tierra no se apelmace. No confundir humedad con encharcamiento lo cual es muy perjudicial para el césped.

Cuando el césped alcance los 2 cm. de altura se disminuirá el riego progresivamente para cambiar a riegos más espaciados pero más abundantes y que alcanzan más profundidad. Cuando el césped haya sido cortado 3 ó 4 veces, daremos un riego menos frecuente y más profundo para estimular el crecimiento de raíces más profundas.

La variedad Ray-Grass germina muy rápidamente, a la semana de la siembra ha germinado, otras especies son algo más lentas. La rapidez de la germinación también depende de la temperatura.

Si plantó tepes de césped natural, debe regarlo de 2 a 3 veces diarias para conseguir que penetre a 2,5 cm. de profundidad. Hay que evitar la saturación de agua y encharcamiento pues las raíces no agarrarían bien en el subsuelo. Cuando el tepe ya haya enraizado en el subsuelo los riegos se espaciarán gradualmente pero se hará con más cantidad. A las 3 ó 4 siegas el riego debe ser menos frecuente y más profundo para estimular el crecimiento de raíces más profundas.

Primer corte

Suele hacerse cuando alcanza entre los 5 y los 10 cm. según especies. Llegado a esta altura se le pasa el rodillo y 2 ó 3 días después se realiza el primer corte. Debe cortarse 1/3 de la altura total del césped, para estimular el crecimiento de nuevos brotes en la corona y se extienda a lo ancho y no a lo alto. En posteriores siegas se ira bajando progresivamente el corte hasta una altura final de 3 a 4 cm. (dependiendo del tipo de césped).

La cuchilla del cortacésped debe estar bien afilada para que produzca un corte limpio. Si la cuchilla estuviera desgastada no produciría un corte sino desgarros en la hoja y tallo. Tampoco debe cortarlo mojado ya que también lo arrancaría.

Posteriormente hay que segar cada semana de Marzo a Junio para obtener un césped fino y tupido, más adelante puede espaciar el segado a dos semanas

Si el corte se hiciera muy bajo el césped no dispondría de suficiente hoja donde incidir el sol para hacer la fotosíntesis, proceso que con la ayuda de la clorofila produce los hidratos de carbono necesarios para el crecimiento y desarrollo de la planta. El corte bajo también podría alcanzar a las yemas de donde salen nuevas hojas. El debilitamiento del césped provocado por un corte bajo lo hace además más propenso a sufrir plagas y enfermedades.

En épocas de mucho calor es conveniente hacer un corte a más altura para que tenga más sombra y así conservar la humedad del suelo y no afecte tanto el sol a las yemas.

Fertilizante de implantación

El continuo crecimiento del césped favorecido por la siega constante produce un agotamiento de los nutrientes de la planta y del suelo del cual se nutre, especialmente del Nitrógeno que se estima que forma parte del césped entre un 3% y un 5%. La ausencia de Nitrógeno provoca un césped amarillento (clorosis), poco tupido y sin vigor, propenso a contraer enfermedades.

El segundo nutriente importante para el césped es el Fósforo, especialmente por su contribución al desarrollo radicular, tan importante tras la siembra durante el periodo de germinación.

En tercer lugar tenemos el Potasio, que ayuda al desarrollo de las raíces y da resistencia ante enfermedades, sequías y fríos intensos.

Para desarrollar un césped sano, verde y vigoroso podemos utilizar las siguientes proporciones de fertilizante:

Dosis Propiedades Época
Fosfato Diamónico 1 a 2 Kg./100 m² Antes de la Siembra
Urea 1 a 2 Kg./100 m² Primavera y Otoño
Triple 15
15-15-15
3 Kg./100 m² Primavera y Otoño

Tratamientos Antiplagas Preventivos

Si existen hormigueros por el suelo, en cuanto esparzas las semillas durante la siembra observarás como las hormigas salen al exterior para recolectarlas y llevárselas. Puede parecerte que el número de semillas que puedan llevarse es pequeño en relación a todas las que has esparcido y sin importancia. Pues te equivocas, en cuanto las hormigas detectan la presencia de semillas es rápidamente comunicado al resto de la colonia y un autentico aluvión de ellas buscarán por todo el terreno hasta dejarlo diezmado de semillas si no pones freno a ello.

Localiza los hormigueros, antes de la siembra si te es posible, y aplica un tratamiento anti-hormigas.

Otra plaga que puede aparecer tras la siembra son los hongos, gracias a la humedad que debe prevalecer en el suelo durante la siembra, especialmente activos en Primavera-Verano.

Existen en el mercado productos fungicidas de amplio espectro (para un amplio abanico de variedades de hongos) que previenen su aparición y que tan perjudiciales pueden resultar al césped cuando este se encuentra en pleno periodo de germinación y desarrollo.

Conviene aplicarlo cuando el césped ya tiene unas 2 ó 3 hojas y repitiéndolo a los 10 días.